Traspasar el velo del mundo detrás del mundo y escuchar el río debajo del rió.

Palpar el tambor del corazón y escuchar los mensajes de la sangre…

…siempre nueva y siempre eterna.

Respirar con el aliento de la loba que habita en la cueva granate de tus entrañas.

Dejar pasar las ideas cuando oscurecen y sostener solo las que aclaran.

Parir los días y criarlos con el sacrosanto oficio del amor,

De la misma manera que hemos criamos los hijos con el sacrosanto oficio de los días,

Enterrarse cuando hay que morir y florecer cuando llega el renacer.

Ahora toca…..

Honrar lo que se fue,

y reconocer lo que quedó,

Vivir con tus muertos y transformarlos en aliados de vida.

Esperar el fuego del amor sin perderte en los hielos del desamor,

Recibir al hombre permitiéndole ser hombre

y dejándote ser mujer

Aceptar el designio que la única tarea antes de morir. que te pide la Gran Diosa y su consorte el Gran Dios

es construir tu alma, elevar tu espíritu y venerar tu cuerpo.

Entonces….. solo entonces, ingresas al clan de las mujeres sabias.

Entonces…

 …solo entonces eres parte de la gran manada de las trasmisoras de las pequeñas grandes verdades,

esas que nos sopla la Diosa al oído y que salen por la boca como cornucopia de frutos que alimentan la humanidad.

  HORTENSIA CARRERHortensia Carrer Psicoterapeuta y analista jungiana. www.hortensiacarrer.com