Desde los fríos mares del Atlántico Norte nos llega el bacalao, un pescado blanco libre de metales pesados y rico en proteínas de alto valor biológico. Con él hemos preparado esta deliciosa receta con un marcado contraste de sabores que seguro que os va a encantar.
El bacalao está indicado en las dietas para reducir peso por su bajo contenido en grasas. Es rico en ácidos grasos Omega-3 que ayudan a reducir el colesterol, y posee una amplia variedad de vitaminas y minerales, entre los que destacan el potasio y el fósforo, presente en dientes y huesos.
Contrariamente a lo que sucede con el azúcar blanco, cuyo consumo facilita la eliminación de calcio de nuestros huesos, la miel ayuda a absorber este mineral, cosa a tener en cuenta sobre todo si se padece osteoporosis o se quiere tener unos huesos fuertes.
Ingredientes (para 2 personas):
- 2 filetes bacalao desalado con piel
- 2 c/s frutos secos variados (piñones, almendras, avellanas, nueces, pasas y arándanos rojos)
- 2 c/ agua mineral
- 2 c/s miel de romero
- 1 c/s aceite de oliva virgen extra
- sal marina
Elaboración:
– Poner la plancha en el fuego y, cuando esté caliente, colocar encima los filetes de bacalao y hacerlos 2-3 minutos por cada lado. Condimentar con sal si fuera necesario.
– Mientras, en una sartén saltear los frutos secos y cuando empiecen a coger color, añadir la miel, el aceite y el agua, y dejar hervir lentamente hasta que la salsa espese.
– Servir los filetes y verter por encima la salsa y los frutos secos.
Notas:
– Debido a su contenido en sodio, conviene desalar bien el bacalao si se padece hipertensión o retención de líquidos.
– c/s: cucharada sopera
Esperamos que este Bacalao con miel y frutos secos os haya gustado y os animéis a prepararlo.
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