EL cáncer de mama es el más frecuente entre las mujeres (y cada vez más en hombres).

Las tres pruebas para la detección precoz del cáncer de mama son:

  • Autoexploración mamaria
  • Examen clínico ginecológico
  • Mamografía

Las recomendaciones son:

45 a 49 años: Autoexploración mensual, exploración clínica anual – 50 años en adelante: Autoexploración mensual, exploración clínica anual y mamografía cada 1-2 años  

Las causas del cáncer no se conocen exactamente. Existen mujeres con mayor riesgo de padecer cáncer de mama, sobre todo si existen casos en su familia, lo cierto es que la mayoría de los casos de cáncer ocurren en mujeres que no tenían factores de riesgo, por lo que en la práctica, TODAS las mujeres deben revisar periódicamente sus mamas.

La autoexploración mamaria es una técnica que consiste en la propia palpación y observación que toda mujer debería realizar de forma mensual.

Se aconseja realizarla todos los meses, 7 a 10 días después de la menstruación ya que durante la regla o en días anteriores es normal que las mamas estén hinchadas o doloridas.

Si ya estás en la menopausia, también has de seguir realizándola. Es conveniente que fijes un día al mes.

La técnica puede intimidar al principio, por ello es preferible realizarla en un ambiente tranquilo y relajado, pero a medida que vayas cogiendo práctica, examinar tu tejido mamario te resultará más familiar y cómodo.

Cuando conozcas el tacto y aspectos normales de tus pechos, serás capaz de percibir los cambios que se produzcan.

No te extrañe si en las primeras exploraciones tienes la sensación de detectar bultos por todas partes. Es normal que los pechos presenten nódulos.

 

OBSERVACIÓN: Colócate de pie delante del espejo, desnuda de cintura para arriba y con buena iluminación.

  1. Con los brazos caídos a ambos lados del cuerpo observa tus mamas:

– Comprueba su forma y tamaño

– La piel debe de ser lisa, no tener pliegues o zonas rugosas

  1. Coloca los brazos en alto y fíjate si ves las mismas alteraciones
  1. Baja los brazos hasta la horizontal, juntando las manos a la altura del cuello y haz fuerza tirando hacia fuera para tensar los músculos y hacer más visible cualquier alteración
  1. Con los brazos a ambos lados del cuerpo observa los pezones y aureolas:

– cambios en su forma o tamaño

– existencia de costras o heridas

– Aprieta ligeramente el pezón para ver si sale alguna secreción de líquido por ellos.

PALPACIÓN

Tumbada boca arriba, coloca una almohada o toalla debajo del hombro y levanta el brazo izquierdo poniéndolo debajo de la cabeza.

Con los dedos de la mano derecha juntos y estirados recorre toda la mama izquierda con movimientos encircular y líneas ascendentes y descendentes. Intenta siempre seguir un mismo orden de palpación, sin dar saltos de una zona a la otra.

Cuando termines explora tu axila. Realiza la misma operación con la mama y axila derecha. 

Recuerda que el autoexamen no reemplaza las visitas periódicas a tu ginecólogo así como la realización de mamografías.

Elena Albert

Directora de calidad , Kavisha Pharma

www.kavishapharma.com