Si hay una planta femenina esa es sin duda el eleuterococo, su raíz es un excelente adaptógeno para la mujer, aumentando la resistencia física y psíquica, dando energía y estimulando el sistema inmunitario.
Arbusto espinoso que puede medir hasta 3 metros de altura, originario de Siberia y Corea de hojas compuestas, flores pequeñas, agrupadas en forma de umbrela, de color amarillo las femeninas y de color violáceo las flores masculinas. Rusia es el país que más ha estudiado esta planta, lo usaban los pilotos en los vuelos espaciales para mejorar su resistencia física i psíquica, también fue ampliamente utilizado en el desastre de Chernobil para disminuir los efectos de las radiaciones. El Dr. Israel Brekhman del Instituto de ciencias de la extinta URSS es quien más ha estudiado esta plata y el que la ha introducido en la fitoterapia moderna.
En su raíz, además de una cantidad importante de fitoestrógenos, encontramos heterósidos derivados del sitosterol como las isiflaxidinas o el siringarenisol.
Estos heterósidos producen un efecto anti hipnótico intenso mejorando la circulación cerebral y en consecuencia la capacidad de concentración. También esos principios activos actúan estimulando la función endocrina especialmente de las glándulas sexuales por lo que actúa como estimulante de la libido.
Seguramente el término “adaptógeno” es el que mejor describe las propiedades de esta planta, su capacidad de estimular inespecíficamente el cuerpo humano , adaptando a las respuestas especificas de cada momento , hace del eleuterococo un excelente aliado para el cuidado de nuestra salud. También conocido como ginseng siberiano, posee propiedades específicas para el tratamiento de enfermedades relacionadas con la menopausia, al aumentar las hormonas femeninas, esta raíz es capaz de disminuir algunos de los síntomas asociados a la menopausia. Es particularmente eficaz en los desarreglos de la menstruación que se producen en la premenopausia. También actúa mejorando la circulación sanguínea y estabilizando las tasas de colesterol e insulina en sangre.
A dosis habituales carece de contraindicaciones aunque por falta de estudios no se recomienda en embarazadas, madres lactante o niños pequeños. Tampoco se recomienda en trastornos asociados al hiperestrogenismo. A dosis altas podría interferir en la acción de algunos medicamentos.
Llorenç Teixé
Herbolario
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