Alegría, aburrimiento, estrés, miedo, tristeza, rabia, amor. ¿A qué saben nuestras emociones? ¿Por qué cada una nos pide comer cosas distintas?
Comer es más que un acto fisiológico; también es un acto social e incluso emocional. Comemos no solo para alimentarnos y aportarle a nuestro organismo la energía y los nutrientes que necesita, sino también para celebrar un acontecimiento, para pasar el rato con nuestros seres queridos o para acompañar una emoción. Este libro repasa, desde la experiencia en el Coaching Nutricional, cómo las emociones influyen en nuestras decisiones alimentarias (a veces poco saludables), y propone recetas alternativas sanas y fáciles de preparar.
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Recuerda, que leer es vida y conocimiento
LAURA LOMBARTE y YOLANDA FLETA
Las emociones se sientan a la mesa
Editorial Comanegra
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