Durante estos meses os he explicado una pincelada de cada una de las 7 diosas, muy diferentes entre sí y, al mismo tiempo, muy familiares en el interior de cada mujer porque todas nos resuenan. No he contado nada difícil de entender porque en la experiencia de cada una encontramos muchos puntos en común con cada diosa.
Siempre lo he definido como diferentes aspectos de la personalidad, los cuales, desarrollamos unos más que otros pero que en realidad los tenemos todos disponibles.Lo que a veces nos es difícil manejar unos más que otros.
Por ejemplo, una mujer muy Artemisa, aventurera, independiente y competitiva con los hombres, le será más difícil vivir desde Hera ya que ésta se desarrolla a través del matrimonio y no compite con el hombre si no que “coopite”, aunque puede llegar a olvidarse de ella misma. Pero hay mujeres Artemisa que en el fondo quieren vivir en pareja pero nunca el hombre hará nada bien porque Artemisa tiene que ser mejor.
¿Cómo se hace?
La llave está en un pequeño cambio en el lenguaje que nos ayuda a dar un pequeño clic a nuestra perspectiva, abriéndonos a la posibilidad de vivir nuevas versiones de una misma.
Hemos empezado el articulo hablando de que las Diosas son diferentes aspectos de nuestra personalidad, es una característica muy propia de la persona, fija e inamovible. Desde este concepto no hay mucho margen de maniobra.
En cambio si nos enfocamos en que cada diosa es una identidad que nosotros elegimos experimentar la vida desde ese filtro, que nos genera unas creencias y con ellas una emoción y una experiencia nos abre la puerta (si lo decidimos) a soltar esa identidad para transitar otra.
Si una mujer Artemisa suelta su valor a la identidad con sus creencias, emociones, etc. Se puede abrir a la posibilidad de transitar a Hera.
Aquí entra la moda como un puente entre lo externo y lo interno.
Seguimos con el ejemplo de mujer que quiere soltar la identidad de Artemisa para abrirse a Hera: ¿Qué descubriría de ella que siempre va cómoda, con sus jeans y botas siempre a punto para entrar en “batalla” se vistiese con un vestido y unos zapatos “femeninos”?
A partir del momento que toma la decisión y pasa a la acción le van a venir pensamientos sensaciones que le va a dar la oportunidad de soltar todos los valores y creencias que está aferrada y al darse cuenta y soltar va a empezar un ping-pong muy íntimo y personal con mucho combustible y riqueza interna y… ¿Quién sabe? Quizá encuentre una pareja en la que pueda compartir la vida desde la libertad de Artemisa sin olvidarse de una misma.
Personal Shopper, gestora de imagen interna y externa.
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